Que una imagen dice mucho más que mil palabras puede sonar algo cliché, pero al usar esta frase para describir el trabajo del artista Luis Quiles, ilustrador español, resulta ser más acertada. Solo necesitas ver sus potentes ilustraciones con crítica social y cultural para entender la razón.
Nos pasamos la vida intentando arreglar el mundo en reuniones de amigos. Pero a cada paso que damos, a cada producto que compramos, estamos dando cancha a los culpables de su destrucción. Siempre he criticado con facilidad al resto, pero con el tiempo he aprendido a ser crítica también conmigo misma. Mi estilo de vida, el de todos nosotros, es culpable de la mayoría de los males del mundo. Vivimos atrapados por nuestros propios estilos.
Luis Quiles te ayuda a reflexionar. Te pones frente a sus ilustraciones y… ¡magia!, ves a través del espejo. Porque criticar el mundo es muy fácil. Hacerlo como lo hace Luis es más complicado. Quizás, este artista ha preferido dejar de lado el discurso aburrido y dogmático tradicional para, mediante el humor, hacer que el mensaje llegue a más personas de una manera más contundente.
La calidad estética de sus personajes parece contrastar con el contexto en el que se sitúan, ya que los rasgos de aparente ingenuidad y serenidad, en algunos casos, de pronto se ven subyugados por una realidad que puede parecer difícil de asimilar para algunas personas.
Las mujeres son el centro de la mayoría de sus ilustraciones. Con esos ojos grandes y expresivos cuentan muchas cosas. Temas como la juventud y las redes sociales. Adolescentes que venden su imagen, porque es lo que se espera de ellas, ante la ignorancia de sus padres… Otras son mujeres que parecen felices, pero algo te dice que no es así, simplemente buscan aprobación. Dolor, ansiedad, ira, ambición de poder, miedo y disgusto, sexo, odio, rabia… Interprétalo tú mismo.
No ser capaz de expresar tu opinión sin consecuencias
El poder de una mujer
Los estereotipos de género
Generación Y o la “Generación Notificación”
Los efectos de la guerra
El titiritero de la juventud en los países devastados por la guerra
El poder del dólar
Los tiburones del dinero
La alimentación forzada debido a los bajos precios de la comida rápida respecto la comida sana
La locura de los medios sociales
La desafortunada existencia de homofobia
La monetización prepotente de los deportistas profesionales
La locura de medicamentos recetados
El activista
Tomado de: upsocl.com
